El Valle del Loira desde las aguas de sus canales
El Valle del Loira es conocido mundialmente por la sucesión de castillos –cada uno más hermoso y sorprendente que el anterior– que se extienden junto al río del mismo nombre. Visitar estas maravillas de la arquitectura medieval y renacentista desde la tranquilidad de un bote rentado es una tentadora propuesta que ofrece la región.
La navegación constituye, como es lógico, una de las actividades más desarrolladas en el Valle del Loira. El canal que corre paralelamente al río es una opción fantástica para conocer por agua la encantadora región con sus espléndidas ciudades.
El recorrido bien puede iniciar en Châtillon-sur-Loire, rumbo a Montargis, al norte. Los numerosos canales que la recorren y sus puentes arqueados le dieron a esta ciudad el apodo de “la Venecia de la región de Gatinais”. En Briene, el acueducto Eiffel, del siglo XIX, es una muestra magnífica de la ingeniería de esta época.
En dirección opuesta, con destino al sur, Sancerre es una magnífica opción, especialmente para los amantes del vino blanco. El queso de cabra es la delicia que los acompaña con la exquisitez de la gastronomía francesa. Continuando viaje, se llega a Nevers, en donde vale la pena detenerse para conocer su Palacio Ducal, y un poco más allá se encuentra Decize, ubicada en la confluencia del canal du nivernais y el río Yonne.
Ya sea en uno u otro sentido de navegación, a lo largo del camino se puede disfrutar de la vista de los viñedos del valle. Las aguas tranquilas de estas vías las hacen ideales para un fin de semana de descanso y reencuentro con la naturaleza, tan necesarios para desconectar un poco de la vida urbana y recargar energías.
A uno y otro lado, las amplias extensiones de alamedas dan sombra a los pescadores que, además de grandes conocedores de la región, son personas amables que estarán bien dispuestas para oficiar de guías si hemos extraviado un poco el rumbo.
Foto Vía: Pbase
