Paso a paso nos encaminamos al Parque Disneyland. Ya os comenté que además de éste, está el Disney Studios; sin embargo, es el principal, el de todas la vida, el que se lleva la mayor parte del tráfico de turistas. Claro, no podía ser de otra forma, porque la primera visión, la que los niños quieren tener, es la de Main Street con el castillo de Bella al fondo.
Las colas para entrar son interminables, es cierto, pero si os habéis alojado en hoteles Disney, tendréis un pase preferente, el Easy Pass, de modo que podréis entrar en los dos Parques una hora antes que el resto de turistas, lo que, en parte, es una ventaja no sólo al entrar, sino al moverse en el interior.
Os aconsejo que aprovechéis esta hora al máximo para sobre todo dirigiros directamente a las principales atracciones, las que más colas hay que soportar luego: Piratas del Caribe, Space Mountain, Peter Pan, Buzzlightyear o Indiana Jones, además, claro está, de la que más visitantes tiene, «It´s a small World«. Os ahorraréis bastante tiempo si lo hacéis así, y es que, aunque parezca imposible, /y os recuerdo que fuimos en temporada baja) las colas llegaban a alcanzar los 90 minutos de espera para subirte en una atracción sin fast pass.
El fast pass acorta el tiempo, pero aún así, el cuarto de hora, mínimo, no os lo quitará nadie. Y es que el fastpass os va a servir para que os den una especie de «cita» para más adelante, para que podáis entrar directamente (o casi). Sin embargo, manejarse con fastpass os requerirá de mucha organización y una buena agenda.
El Parque cuenta con cuatro zonas de atracciones más una zona de compras. Esta última zona es la Main Street, realmente vistosa y llamativa, donde os podéis detener en cada una de las tiendas porque cada una es diferente y con detalles dignos de fotografiarse. La plaza de la entrada, junto con la estación del tren que recorre el Parque, está los «edificios públicos» del Parque (su Ayuntamiento, su Parque de Bomberos, etc.) Y al fondo de la calle, el mágico castillo de Bella. Es este recorrido, el de la plaza de entrada, Main Street, Plaza del Castillo el que todos los días recorre las cabalgatas de Disney.
Y en torno a la plaza del Castillo, las cuatro zonas de atracciones:
– Frontierland
Ambientada en el Oeste, es de las cuatro la mejor conseguida y la más fotogénica, sin duda alguna. La mejor atracción es la Big Thunder Mountain, una montaña rusa en la que te montas en vagonetas, y atraviesas la montaña como si de una excursión minera a toda pastilla se tratara. Destacables en esta sección son también la Mansión Fantasma en la que podrás recorrer una antigua mansión habitada por espectros, y el clásico barco a vapor que recorre el lago y que en tantas pelis del Oeste hemos visto, el Riverboat.
– Adventureland
De estilo oriental es la residencia de Aladdin. Por cierto, Aladdin es una atracción bastante escondida pero que me sorprendió. Es sólo una calle interior que serpentea y por la que vas recorriendo escaparates que recrean roda su historia. La atracción estrella en esta zona es Piratas del Caribe, donde recrearás el mundo pirata en unas barcas subterraneas. La recreación es espectacular al igual que sus decorados. Indiana Jones es una tremenda montaña rusa, especial para los amantes de la adrenalina.
Yo destacaría esta zona también porque pasear por ella es especialmente relajante: mucha vegetación y mucha agua, nada que ver con el ambiente más seco y terroso de Frontierland (lógico dado que es del Oeste).
– Fantasyland
Su nombre lo indica: la tierra de la fantasía. El lugar mágico para los niños, el que nos retrae a los mayores a nuestra infancia; allí donde viven Alicia, y Peter Pan, Y Pinocho, y Blancanieves y la Bella y la Bestia. Espectacular el decorado cómico de muchos lugares, aunque las atracciones son quizás para los más pequeños. A mí particularmente, me encantó la de Peter Pan, en la que hacemos un recorrido «por los aires» mientras más abajo se desarrolla toda la historia de Peter. Sin embargo, la más laureada es It’s a small world, un auténtico boom del parque, y la más visitada con diferencia. Relajante al máximo, y muy infantil, sin embargo, es para disfrutar de sus decorados. La música, peligrosa, porque la tararearéis durante días. Por su parte las atracciones de Pinocho y Blancanieves no son demasiado espectaculares, pero no podéis dejarlas de ver, porque de nuevo, los decorados, los bordan. En cuanto al laberinto de Alicia pues la disfrutarán, sobre todo, los niños.
– Discoveryland
Es la tierra del futuro. La de los avances tecnológicos, la de la ciencia ficción. Como decoración, sin duda, la más floja, pero para los amantes de lo moderno, pues sin duda disfrutarán con atracciones como la de Star Tours en la que surcaréis el espacio a bordo de una nave espacial de la Guerra de las Galaxias, la Space Mountain, una especie de lanzadera en la que os sentiréis casi flotando en el aire, o el laser blast de Buzzlightyear, en la que tendréis que poner a tono vuestra puntería con las pistolas láser. Punto y aparte para la atracción del Capitán Eo, sobre todo, para los mayores, quienes disfrutaréis de la mejor época de Michael Jackson, quien participó en el montaje de esta atracción.
Y tras recorrer el Parque, nuestro siguiente paso será dirigirnos al Disney Studios, el otro parque…