Macizo de Oisans, paraíso del ecoturismo
Alguna vez el macizo más alto de Francia, con su punto culminante la Barre des Écrins de más de cuatro mil metros de altura, rivalizando en belleza y exotismo con el Mont-Blanc aunque menos turístico, el Macizo de Oisans, en la región de los Alpes-Ródano, es un paraíso para los amantes del turismo aventura, la escalada y el alpinismo, con sus 10 Km2 de glaciares y cumbres como la Meije.
Este territorio fue habitado por los míticos Ucenis, en la Edad del Hierro; la historia de la región ha sido forjada por los minerales. Las entrañas de la montaña albergan oro, cuarzo y otros valiosos minerales que hicieron las delicias de los buscadores de gemas desde fines del siglo XVIII.
Para saberlo todo acerca de los minerales, lo mejor es visitar el Museo de Minerales y Fauna de los Alpes, que alberga la mayor colección de minerales de los Alpes de Francia. También, el Centro de Geología de Oisans, que ofrece paseos y visitas por los alrededores además de cursos y conferencias.
El punto de partida debe ser Besse-en-Oisans, un pequeño pueblo considerado uno de los más bellos de Francia, con sus ermitas, capillas, fuentes y los más hermosos tesoros de la cultura de la alta montaña. Otros lugares para visitar son La Bérarde, puerta de entrada a las montañas La Meije y La Barre des Ecrins, donde se concentran los montañistas y senderistas antes de partir hacia el corazón del macizo, y Alpe d’Huez, con su subida en zig-zag e hitos históricos del Tour de France. Los principiantes podrán disfrutar las vías ferratas, con un sinnúmero de puntos de escalada para todos los niveles.
Ideal para caminantes es el Parque Nacional de Ecrins, con senderos especialmente diseñados para contemplar la naturaleza, puntos de observación y paneles informativos y las Casas del Parque que ofrecen alojamiento si la idea es quedarse; también pueden recorrer los verdes valles de l’Eau d’Olle y el Lignarre.
La montaña Oisans merece dedicarle tiempo para disfrutar a pleno todos los placeres de la montaña, incluida la gastronomía; de hecho, aquí cada plato tiene su propia historia: crozets, farcis, ganèfles o tartas de arándanos, quesos de granja artesanales y mucho más para reponerse adecuadamente después de un largo día de bicicleta, caminata o escalada.
Es muy fácil llegar a Oisans; deben tomar la carretera hasta Grenoble y allí la salida 8 hasta las estaciones de Oisans, a unos 50 Km. de Grenoble. También se puede llegar con el TGV hasta Grenoble y desde allí un autobús hasta Bourg d’Oisans. Si prefieren volar, el aeropuerto más cercano es el de Grenoble – Isère, a 91 Km. de Bourg d’Oisans.
Foto: vía Wikipedia
