Versalles celebra el tricentenario de su capilla
La capilla real de Versalles es uno de los edificios más impresionantes de los que existen en todo el complejo monárquico. A diferencia del resto de estancias religiosas, que siempre se construían parejas a estancias de los monarcas o a habitaciones comunes.
Esta es la primera que se edificó individualmente, al margen de otras habitaciones y es, además, donde se casaron Luis XVI y María Antonieta. Su construcción se inició en 1699 siguiendo los planos de Jules Hardouin-Mansart y terminada en 1710 bajo la dirección de Robert de Cotte.
De este modo en este año se cumple el tricentenario de su inauguración, lo que da para organizar toda una serie de actos conmemorativos, comenzando por una exposición en el palacio de Versalles. No en vano, ya sabréis, si es que ya tenéis vuestros vuelos a París, que la visita al Palacio es una de las excursiones más solicitadas en la capital francesa.
A lo largo de estos meses la exposición evoca la génesis de esta sorprendente capilla, así como los momentos destacados de sus tres siglos de historia. Todo ello permitirá al visitante comprender mejor las audacias arquitectónicas y la sorprendente riqueza de su decoración que completaba con su espectacular mobiliario, aunque actualmente ya haya desaparecido y no podamos disfrutar de su magnificiencia.
Entre las obras que se exhibirán excepcionalmente al público con motivo de la muestra destaca un armario litúrgico donado por Luis XIV a la iglesia del Santo Sepulcro de Jerusalén.
Una publicación, así como conciertos y una visita que permite conocer los entresijos de la capilla acompañarán esta exposición, la primera que se dedica a la capilla real desde que se construyó. Además, uno puede aprovechar para disfrutar del buen estado que presenta este edificio después de haber sido objeto de una larga maduración y unos esfuerzos financieros considerables por parte del departamento de patrimonio francés.
La exposición podrá visitarse hasta el próximo 18 de julio en el mismo horario que el resto del palacio de Versalles. Es decir, todos los días excepto lunes, de 9 a 18.30 horas. La última visita se realiza media hora antes de cerrar.
Versalles es un lugar que bien merece una visita si acudís a Francia y ya sabéis que apenas está a media hora en tren de París. Pero este verano es aún más interesante dado que, además de la exposición sobre la capilla real, se puede disfrutar de ‘Les Grandes Eaux Musicales’ (Las Grandes Aguas Musicales). Se trata de los majestuosos espectáculos de luz y sonido con los que se resaltan los jardines de palacio los sábados y domingos por la noche. Os recomiendo que, dadas las fechas de temporada alta en el país galo, vayáis reservando ya vuestros hoteles en Paris porque el 14 de julio, día de la fiesta nacional, habrá una programación aún más magnífica, si cabe.
Foto Vía Sinfómano
