Sartène, en la isla de Córcega
También conocida como Sartè, Sartène es un tradicional pueblo de Córcega, considerado por muchos como el “más corso” de los parajes isleños. Construida en un escenario rodeado de montañas de granito gris, es hogar de numerosos edificios excavados en la roca, datados de los primeros años del siglo XVI.
Los ataques de piratas procedentes de Algiers fueron una constante en la historia de Sartène, desde el siglo XVI hasta el XVIII. El episodio más oscuro tuvo lugar en 1583, cuando unas 400 personas fueron secuestradas.
El corazón de Sartène es la Place de la Liberation –o Plaza de la Liberación–, antiguamente llamada Place Porta. La fachada más destacada allí es la correspondiente a la iglesia de Santa María.
Desde las partes más altas de la ciudad es posible admirar el hermoso paisaje de los valles que la rodean. En estas fértiles tierras, los viñedos son protagonistas, al igual que las bodegas en donde se producen los deliciosos vinos Sartène.
Aun cuando el temor por los ataques piratas cesó, este pueblo no encontró la verdadera paz. Sus calles fueron testigos de la formación de numerosos clanes que derramaron sangre a principios del siglo XIX. En la misma época, los dueños de las tierras correspondientes a las cercanías de Sartène se enfrentaron en una feroz batalla para obtener beneficios sobre los terrenos, y la mayor parte de la población de entonces debió abandonar el lugar.
Felizmente, estos días han quedado atrás, y lo que hoy podemos decir de Sartè es que nadie que disfrute de unos días de estancia en Córcega debería dejar de visitarla. Hermosa e impactante, suma a su riqueza natural un fenómeno cultural creciente: la Procession du Catenacciu.
La procesión consiste en una recreación de la Pasión de Jesucristo. Cada año, durante el viernes de Pascua, el Catenacciu (es decir, “el encadenado”) se cubre con una toga roja y cubre su rostro para permanecer en el anonimato, y con una cruz sobre sus espaldas realiza el camino, en busca de la expiación de sus pecados.
Foto Vía: Gite de Foce