Gastronomía parisina, un día lleno de sabor
¿Sabías que París cuenta con más de 12.000 establecimientos gastronómicos? La mayoría de los restaurantes se concentran en el distrito 15, pero las casas de comidas rápidas o autoservicio están en los distritos 8, 9 y 17.
En realidad, los turistas últimamente prefieren las comidas rápidas durante el día, tanto que las panaderías de París se han adaptado a esta demanda ofreciéndoles menúes atractivos y a buen precio ideales para no perder un minuto de su precioso tiempo.
La gastronomía parisina se destaca por su refinada sencillez y la frescura de sus productos, pero los visitantes valoran tanto los ingredientes como el ambiente relajado e informal de los restaurantes parisinos y la posibilidad de las largas sobremesas. Los productos más valorados son los dos panificados emblemáticos: “croissants” y “baguettes”, esas largas y doradas barras de pan. También los chocolates, el café, las salsas, los vinos, los quesos… y la atención de los camareros (garçons), verdadera institución de París.
Desayuno
Para empezar el día, lo mejor es un sencillo desayuno parisino: una taza de café y un croissant recién elaborado, con mantequilla fresca, crujiente y bien hojaldrado.
Media mañana
Para mantenerte en pie durante la mañana, puedes visitar una panadería y adquirir una baguette, brioches o galettes, auténticas delicias recién salidas del horno.
Almuerzo
A la hora del almuerzo se puede hacer turismo gastronómico, visitando alguno de los muchos mercados de París, como el que se encuentra en la avenue du Président Wilson, entre el Palacio de Tokyo y el Palacio Galliera: hortalizas, frutas verduras, pastas, carnes asadas y quesos de sabores realmente inolvidables.
Si la idea es ir de camping y preparar tu propia carne asada te recomendamos adquirir carne de cordero, buey o ternera, en alguna carnicería o mercado. En cambio los que prefieran una tarde de picnic llevando sus propias viandas deberán visitar alguna de las pocas charcuterías que quedan en París para adquirir jamón al verdadero estilo parisino: cocido en caldo casero, sin aditivos ni conservantes. También podrán adquirir paté, foie-gras o mi-cuits en conserva.
Merienda
A la hora de la merienda se imponen la taza de chocolate, el té o el sorbete, saboreados en una terraza o en un restaurante con mesitas en la acera, acompañados por bizcochos “dacquoise” (merengue y frutos secos), pastas “sablées” (amasadas con manteca), tartas y excepcionales milhojas. Se puede intentar llegar hasta uno de los renovados «guingettes» o merenderos de las afueras de la ciudad.
Aperitivo
Entre la merienda y la cena puede tomarse un aperitivo: quesos y vinos como los blancos de la Goutte d´Or son los ideales de la gastronomía parisina.
Cena
A la hora de la cena puedes elegir entre los restaurantes y «brasseries» del Quai d’Orsay, los del Triángulo de oro (el Sena, la avenida de los Campos Elíseos y la plaza de la Concordia) donde se encuentran algunos de los más prestigiosos, o un sencillo bistró en el distrito 13; lo importante es instalarse cómodamente en excelente compañía, en una terraza o jardín, y disfrutar un menú bien parisino: platos elegantes, buen humor, productos frescos de temporada y por supuesto en alguna preparación “á la Parisienne”: con champiñones y otros ingredientes que se cocinan en vino blanco sin que llegue al punto de ebullición.
Foto: vía Ronan Robert
